Elementos constitutivos de la cabeza
Cráneo: tallado en madera normalmente anatomizado, siendo raro en el caso de los personajes femeninos, que en él se encuentre tallada la cabellera; en esta obra se aprecia sin embargo la talla de una cinta alrededor de la cabeza y el esbozo geométrico de la cola, elementos muy característicos de la obra de Juan de Mesa. Sin embargo, lo habitual es encontrarnos superpuesto una peluca de pelo natural, con la cabeza sin detallar, o bien, con el cabello apenas esbozado.
Rostro: tallado en parte frontal de la cabeza, en él encontramos representados los rasgos faciales del personaje sobre una base de encarnación que imita el tono de carne, sobre la que viene pintada la boca, las fosas nasales y las áreas de pelo, como pestañas y cejas o el peleteado de intersección con el cabello, ya que los ojos además de estar pintados, pueden estar realizados con distintos materiales.
En el rostro encontramos los elementos que realzan los rasgos faciales:
Lágrimas: Realizadas de cristal soplado se pegan al rostro en los puntos adecuados con un adhesivo.
Pestañas: Pintadas en la policromía o elaboradas con pelo natural pegadas a los bordes de los párpados de ambos ojos.
Peluca: De pelo natural se superpone al cráneo de la imagen
Ojos: Según la obra puede ser de tres tipos según su material y la forma como se coloca en la cabeza.
Por su interior, podemos distinguir:
1. De cristal con forma esférica como en este caso, conocidos como “de bola”.
2. De cáscara de huevo, cortados a medida.
Por el exterior, ahuecados perimetralmente a las orbitas oculares, que se separa como una tapa por los párpados, para permitir la introducción del ojo, de ahí su nombre “de tapilla”.
Dientes: Tallados y policromados o de marfil o hueso insertados en el interior de la boca.
Cuello: de forma cilíndrica, más o menos anatomizado, se talla en el bloque de base uniendo la cabeza con la parte central del tronco formando un todo.
Tronco: Constituido por la parte superior del torso hasta la cadera. Por lo general lo encontramos tallado de forma anatómica para resaltar el cuerpo de la imagen cuando está vestida. En las Vírgenes, como ocurre en este caso, además de marcarse los pectorales, cintura y cadera, se encuentra tallado el corpiño; posteriormente, el conjunto viene policromado, encarnando las áreas de carnes y pintando las zonas de vestido normalmente de colores vinculados a su iconografía.